Le pregunté al oído:
¿y por qué si nos pertenecemos nos huimos...?
respondió con un silencio… seguí preguntando
¿y porque no nos arriesgamos?
él respondió: te he necesitado varias veces…
algunas lágrimas se me escaparon mientras le decía:
contigo era feliz aun cuando lloraba.
Tiburón-Arena
víspera de media noche,
última noche de marzo
No hay comentarios:
Publicar un comentario