Lo cotidiano hecho farándula
El café de la mañana, la guajolota de la esquina, el esquite
de la tarde… todos ellos como los protagonistas de la nueva farándula de las
redes sociales; casi siempre, acompañados con la leyenda terriblemente repetida
por todos: “aquí haciendo/comiendo/bailando…” Esta cotidianeidad del cuerpo se
hace presente en un espacio de exhibicionismo y voyeurs. El sujeto voyeur que
espía detrás de una ventana virtual que simula el agujero de la llave en la
chapa de la puerta. El exhibicionista que fotografía un tamal para arrancarlo
de su primigenia y natural función en el mundo diario.
¿Cuál es la razón de esa nueva necesidad de hacer popular lo
trivial? Quizá la propia soledad de la modernidad y, aún más, de la posmodernidad. Es esa
soledad la razón de que los momentos más triviales dejen de serlo y cada acción
y movimiento se describa, se fotografíe, para que otros cuerpos, desde la
lejanía de la red, sean testigo y acompañantes de una cotidianeidad en
solitario.
1 comentario:
La cotidianidad es la forma de que la gente disfruta o sufre la vida. Los personajes de Manifiesto son hermosos porque atrapados en la cotidianidad (de la guajolota) logran expresar sus más profundas aspiraciones humanas. No sé si esto se volvió crítica o peor aún, halago...
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